Tras sopesar varias alternativas hemos reservado el albergue de Valtorres, que se localiza en la comarca zaragozana de Calatayud.
Interesados en el plan
Albergue Municipal de Valtorres
Situación: A 221 km. de Madrid, en la comarca de Calatayud. Al ir desde Madrid por la A-2 se toma la salida de Ateca pero antes de llegar a este pueblo, en una rotonda, encontramos la carretera a Valtorres y Munébrega.
Provincia: Zaragoza.
Contactos: Javier (670.033.887) y Noelia (695.821.533), ambos concejales del pueblo. Será esta última quien nos reciba y nos dé la llave.
E-mail: aragonia@telefonica.net
El albergue ocupa el edificio de la antigua escuela y lleva solo 3 años abierto.
Capacidad: 16 plazas en 8 literas dobles (hay que llevar saco). En un armario se guardan las sábanas y las colchas pero no hay mantas.
Otros servicios: Dos baños con duchas. Calefacción de butano y agua caliente. Cocina completa con menaje. Salón comedor. TV y wifi gratuito.
Tarifas: 100 euros / noche por el alquiler completo. Se adelanta el importe de una noche como fianza.
En la plaza del pueblo hay tienda de alimentación (reciben pan) y bar. Ateca, que tiene de todo, se encuentra a solo 4 km. Y Calatayud a solo 12 km.
Comunidad de Calatayud
Surge como entidad administrativa inmediatamente después de la reconquista de la zona por Alfonso I en 1120. Al año siguiente se le otorgó el fuero a la ciudad de Calatayud y se puso bajo su jurisdicción el territorio circundante, integrado por 6 sexmos y 60 aldeas. Al frente de la comunidad había un procurador general y cada aldea tenía su propio jurado como autoridad administrativa. Esta entidad administrativa pervivió hasta el siglo XIX, convirtiéndose en efímera provincia en 1821 y en partido judicial en 1833.
En 2001 la Comunidad de Calatayud volvió a constituirse en comarca y en la actualidad es una de las comarcas más extensas de Aragón. En total agrupa a 67 municipios, la mayoría de los cuales no supera los 500 habitantes.
Calatayud es la cabecera comarcal y los núcleos más poblados después de Calatayud son Ariza, Ateca y Alhama de Aragón.
Su eje vertebrador es el río Jalón, que durante siglos ha sido la vía natural de comunicación entre la meseta castellana y el valle del Ebro.
Se ubica en el corazón del Sistema Ibérico. A lo largo de su territorio se suceden las sierras abruptas (La Virgen, Vicor, Armantes, Algairén, etc.), alineadas en su mayoría de NO a SE, siendo sus máximas alturas los picos de la Virgen de la Sierra (1.433 m.) y del Rayo (1.420 m.).
Se ubica en el corazón del Sistema Ibérico. A lo largo de su territorio se suceden las sierras abruptas (La Virgen, Vicor, Armantes, Algairén, etc.), alineadas en su mayoría de NO a SE, siendo sus máximas alturas los picos de la Virgen de la Sierra (1.433 m.) y del Rayo (1.420 m.).
En las fértiles vegas de ríos como el Jalón o el Jiloca se ha desarrollado la huerta y se cultivan frutales.
A medio camino entre el monte y las vegas están los almendros, los olivos y las viñas.
En el siglo pasado se repoblaron las laderas de las sierras con pino carrasco y pino resinero, que muchas veces se plantaban aterrazando el terreno e incluso eliminando la vegetación autóctona.
Han sobrevivido algunos bosques singulares como el sabinar de Sisamón, el alcornocal que se extiende por los términos de Aniñón y Villarroya de la Sierra o la dehesa del pueblo deshabitado de Prados.
En el siglo pasado se repoblaron las laderas de las sierras con pino carrasco y pino resinero, que muchas veces se plantaban aterrazando el terreno e incluso eliminando la vegetación autóctona.
Han sobrevivido algunos bosques singulares como el sabinar de Sisamón, el alcornocal que se extiende por los términos de Aniñón y Villarroya de la Sierra o la dehesa del pueblo deshabitado de Prados.
Enorme variedad de formas geológicas y de paisajes
Los yesos, de color blanquecino, conforman auténticos paisajes lunares en el barranco de Valdehurón, próximo a Calatayud, la sierra de Armantes y los valles de los ríos Jiloca y Perejiles.
Las arcillas, de tonos rojizos, alternan con las calizas y con el verdor de la vegetación en el Alto Jalón, en el Monegrillo y en el curso alto de los ríos Piedra y Mesa.
Las pizarras, de tonos metálicos, dominan en el Grío y en la cubeta del Frasno.
Las calizas adquieren en algunas zonas formas agrestes y caprichosas, moldeadas por la acción del agua, como las chimeneas de hadas de Ibdes, las cercanías de Alhama o Embid de Ariza, los cañones de Calmarza y Jaraba en el río Mesa, el tramo del río Jalón entre Huérmeda y Embid de Ariza o el tramo del río Manubles en las proximidades de Bijuesca.
Las cuarcitas afloran en zonas de cumbres.
A veces calizas y cuarcitas se entremezclan, dando lugar a paisajes complejos y de gran belleza.
Se distribuye en dos alturas y bodega.
La planta baja tiene patio y corral; la primera planta, cocina, sala y alcobas.
Bajo el tejado existe un entrepiso con granero y a veces con solanar.
En la fachada suele haber un banco de obra (o cantón).
Preferentemente se construía en adobe o tapial, con zócalos y esquinas en piedra, aunque también hay ejemplos realizados completamente en piedra.
Los muros se encalaban al exterior y al interior, en blanco o azul.
Las ventanas eran pequeñas con objeto de protegerse del frío.
Los suelos se recubrían con empedrado en los patios y con yeso fino o baldosa roja en las habitaciones.
La arquitectura popular del valle de Perejiles presenta algunos rasgos particulares. Se utilizaba un singular aparejo de construcción, a base de bloques cuadrados de yeso, asentados con mortero. Eran conocidos popularmente como losas y se empleaban en la construcción de viviendas y pajares, disponiéndolos sobre un zócalo de piedra sillar. Generalmente se enlucía el conjunto para darle un aspecto uniforme. La piedra de yeso, de un característico color grisáceo, aflora en los montes de la zona. Existen buenos ejemplos de este tipo de construcción, única en la comarca, en Villalba de Perejil, Belmonte de Gracián y Mara, aunque actualmente ha caído en desuso.
Siguen practicándose la agricultura y la ganadería.
Uno de los principales soportes de la agricultura es el vino, con la denominación de origen Calatayud, aunque también destacan el cereal y los productos hortofrutícolas (la fruta del Jalón tuvo ya fama en la Roma clásica y en el siglo XVIII era consumida incluso en la Corte).
En las sierras se dan cultivos como almendros y olivos; en terrenos más favorables, cerezos y vides.
Se han abandonado los antiguos huertos, las parcelas de pequeño tamaño y los campos de menor rendimiento, a los que solo se podía acceder con mulas, y se ha apostado por las explotaciones de mayor tamaño, susceptibles de ser mecanizadas.
En muchos lugares se encuentran en uso las acequias trazadas por los árabes (como en Villarroya o Aniñón); las de origen romano se han perdido casi por completo, aunque en las vegas del Jalón y del Jiloca aún se conserva el trazado de algunas.
Celtíberos
Fundaron las ciudades de Bílbilis (cerca de Calatayud), Arcóbriga (en el término de Monreal de Ariza) y Segeda (entre Belmonte de Gracián y Mara).
Romanos
La Bílbilis romana se fundó sobre el primitivo núcleo celtíbero y contó con foro, teatro y termas. Uno de sus habitantes más ilustres fue el poeta Marcial, magistral e insuperado compositor de epigramas (pequeños poemas satíricos).
Dominación musulmana
Los musulmanes dominaron la comarca desde el año 714 hasta su reconquista por Alfonso I en 1120.
En el año 716 fundaron Qal'at Ayyub (hoy Calatayud), que pronto se convirtió en la ciudad más importante de la comarca.
Tras la reconquista muchos musulmanes emigraron pero otros, los mudéjares, se quedaron en la comarca.
En 1610 Felipe III decretó la expulsión de los moriscos. Aproximadamente 1.500 familias de la comarca de Calatayud se vieron forzadas a dejar sus tierras. La expulsión tuvo graves consecuencias en las poblaciones en que los moriscos eran mayoría, como Villafeliche o Terrer.
La huella dejada por los musulmanes es imborrable en muchos aspectos (topónimos, tradiciones, arte, urbanismo, sistemas de explotación agrícola, gastronomía, etc.).
Los judíos
Calatayud tuvo una comunidad judía importante, constituida como aljama desde el siglo XII.
Los judíos desarrollaron una intensa actividad comercial, artesanal e intelectual, permaneciendo en la ciudad hasta el edicto de expulsión de 1492. A partir de este momento los no convertidos tuvieron que emigrar y los judeoconversos mantuvieron en muchos casos sus antiguas prácticas religiosas en la clandestinidad.
El Cid Campeador
En el Cantar de Mío Cid se cuenta que el Cid atravesó el valle del Jalón en su destierro, pero no hay evidencias históricas de que así sea.
Lo que si está confirmado por fuentes históricas es que recorrió la zona a finales del siglo XI y conquistó Alcocer en la célebre batalla del mismo nombre.
Industrialización
En el siglo XIX llegaron los grandes avances, como el ferrocarril o la luz eléctrica, que mejoraron las condiciones de vida de los habitantes de la zona, aunque muchos pueblos quedaran al margen hasta bien entrado el siglo XX.
La industrialización se inicia a finales del XIX y cobra impulso a principios del XX, con la fundación de bodegas y la instalación de fábricas harineras, azucareras y papeleras.
Muchas líneas férreas y fábricas se vieron obligadas a cerrar, quedándonos un rico patrimonio industrial (estaciones de ferrocarril abandonadas, fábricas de esbeltas chimeneas, etc.) que debiera conservarse y readaptarse a nuevos usos.
Éxodo rural
A partir de la década de 1960, la emigración a la cabecera comarcal, a la capital de provincia o a otras regiones de España ha sido constante.
Bílbilis
Se encuentra unos 5 km. al noreste de Calatayud.
Impresiona su situación. Se halla emplazada a unos 700 metros de altitud, en lo alto de los cerros de Bámbola, Santa Bárbara y San Paterno, dominando las hoces del Jalón y la estratégica confluencia de los ríos Jalón y Ribota.
Era una ciudad de origen celtíbero, fundada por la tribu de los lusones. Tras su conquista por Roma, se convirtió en una ciudad totalmente romanizada en cuanto a su morfología urbana, organización y mentalidad. En ella nació el poeta Marcial. La ciudad romana se alzó sobre el primitivo asentamiento celtíbero y fue reurbanizada completamente, adaptándose el urbanismo a la topografía y conectándose las calles y los espacios públicos mediante terrazas, rampas y escaleras. Su muralla abrazaba 30 hectáreas. Roma le otorgó el nombre de Bílbilis Augusta y el privilegiado estatuto de municipio de ciudadanos romanos.
A la entrada del yacimiento hay un pequeño centro de interpretación .
Se recomienda visitar el Museo de Calatayud, en el que se exponen muchos restos, objetos y materiales arqueológicos hallados en las excavaciones de Bílbilis.
El foro, que era el centro de la vida urbana, se ubicaba sobre el cerro de Santa Bárbara y estaba coronado por un templo sobre podio, dedicado al culto imperial, al que se accedía por una gran escalera. La plaza se hallaba rodeada de pórticos y tiendas.
El teatro se construyó aprovechando la pendiente de la ladera. Tenía una capacidad de 4.500 espectadores. Se conservan parte del frente del escenario, la orquesta y buena parte de la cavea o graderío.
Las termas públicas, en la parte alta de la ciudad, están bastante bien conservadas. Sus estancias se hallaban decoradas con pinturas parietales y mosaicos en los suelos. El apodyterium (vestuario) da paso al frigidarium (sala de baños fríos), al tepidarium (sala templada) y al caldarium (sala caliente con calefacción de hipocausto bajo el suelo y por las paredes).
Arcóbriga
Es un yacimiento situado en la margen derecha del río Jalón, próximo a Monreal de Ariza.
Muchos de los materiales excavados se encuentran en el Museo Arqueológico Nacional y en el Museo Cerralbo, ambos en Madrid.
Era una ciudad de origen celtíbero, como denota su nombre y señaló Ptolomeo, aunque a partir del siglo I d. C se transformó en una ciudad totalmente romanizada, que estaba protegida mediante una doble muralla. Plinio la cita como ciudad dependiente de Caesaraugusta y sujeta a tributo. El Itinerarium de Antonino (o guía romana de caminos) sitúa en ella una mansio o etapa oficial en la vía entre Segontia y Aquae Bilbilitanorum.
De la ciudad celtíbera quedan solo restos de una necrópolis (siglos III-II a. C.).
De la ciudad romana se han conservado el foro con macellum (mercado), el templo de Mercurio, la basílica cívica y una fuente. Se aprecian también restos de un posible teatro, de un recinto termal de casi 700 metros cuadrados, situado en el noroeste del cerro, y de un praetorium o palacio de audiencias.
Segeda
Es un yacimiento que se encuentra entre Mara y Belmonte de Gracián.
Su nombre es celtíbero y alude a la victoria (el prefijo celta Seg-).
Se trata por tanto de otra ciudad de origen celtíbero, que adquirió gran importancia gracias a su situación y a su actividad metalúrgica (hierro y plata).
Fue la primera y última ciudad emisora de moneda en Celtiberia y es citada por autores como Apiano, Diodoro, Floro, Estrabón y Esteban de Bizancio.
Una ampliación ilegal de sus murallas originó la gran guerra con Roma en el año 154 a. C. El cónsul romano Nobilior, al frente de un ejército de 30.000 hombres, la tomó al asalto. Los segedenses se refugiaron entonces en tierras de los arévacos, eligieron como caudillo a Caro y el 23 de agosto del año 153 a. C. infligieron una derrota humillante a las legiones romanas. La guerra concluiría en el año 133 a. C. con la toma y destrucción de Numancia.
La ciudad fue abandonada y a pocos kilómetros de ella se alzó otra nueva siguiendo los patrones urbanísticos romanos, con amplio foso y muralla, pero sería destruida en el siglo I a. C., quizá por su apoyo a Sertorio durante la guerra civil romana, el cual saldría perdedor.
Se trata de un arte cristiano de raíces islámicas, considerado por muchos una de las manifestaciones artísticas más originales de la Península Ibérica.
En la comarca de Calatayud son numerosas las iglesias construidas en este estilo entre los siglos XIII y XVI.
Se caracteriza por emplear materiales autóctonos (ladrillo, yeso, madera o cerámica vidriada) y combinarlos recreando formas vegetales, geométricas y caligráficas que son propias del arte islámico.
Sus manifestaciones más características son las esbeltas torres de ladrillo, que van desde los ejemplos más primitivos y puros de los siglos XIII y XIV (Ateca, Belmonte, Aniñón y Terrer) a los más tardíos del siglo XVI (San Andrés de Calatayud, Villafeliche y Fuentes de Jiloca), en los que se entremezclan los rasgos puramente mudéjares con el nuevo arte renacentista, aunque cabe también mencionar los alfarjes (o artesonados), las yeserías y los azulejos.
Una importante aportación del mudéjar local son las iglesias-fortaleza, que tienen planta rectangular, tribunas sobre las naves laterales y cabecera recta, compartimentada en tres capillas. Sus torres-contrafuerte les dan al exterior un aspecto de fortaleza militar. Los ejemplos más representativos son las iglesias de la Virgen en Tobed, de San Félix en Torralba de Ribota y de Santa Tecla en Cervera de la Cañada. Su fisonomía defensiva responde a la necesidad de dotarles de seguridad tras el estallido de la guerra de los Pedros, que enfrentó a Aragón y Castilla a mediados del siglo XIV.
San Félix de Torralba tiene tres hermosos retablos góticos, que narran las vidas de San Félix, San Andrés y San Martín de Tours, con escenas polícromas realizadas al temple sobre pan de oro.
Santa Tecla de Cervera de la Cañada conserva en su interior la decoración mudéjar original (esgrafiados en los muros, yeserías en los ventanales y artesonado en el techo).
Marcial
El famoso poeta de la Antigüedad nació en la ciudad hispanorromana de Bílbilis.
Con solo 23 años, siendo emperador Nerón, se trasladó a Roma. Gracias a su ingenio excepcional y a su habilidad para componer poemas se ganó el favor de los emperadores Tito y Domiciano, hijos ambos de Vespasiano.
Sus obras más exitosas fueron el Libro de los espectáculos (doce libros de epigramas) y los breves poemarios titulados Xenia y Apophoreta. Mostró una maestría insuperada en la composición de epigramas, breves poemas satíricos que resultan muy interesantes para conocer la sociedad romana del siglo I d. C.
En total residió 34 años en la capital imperial, aunque sintió siempre una enorme nostalgia por su lejana tierra y por su río Jalón, a los que se refería desde Roma con versos cargados de amor:
A veces te sorprendes, Avito, de que yo hable sin cesar de pueblos lejanos y de que, envejecido en la ciudad latina, sienta sed del aurífero Tajo y de mi patrio Jalón y añore los humildes predios de mi colmada casería.
(...)
Paisanos míos, a los que Bílbilis Augusta engendra en el abrupto monte que baña el Jalón con sus rápidas aguas, ¿no os causa algún contento la radiante gloria de vuestro poeta?
(...)
No nos avergoncemos de cantar los nombres bárbaros de Bílbilis, ni el Jalón, en cuyas aguas se templan las armas de acero; ni el de Mediolum, cuyos habitantes manejan tan bien el arco, y si el cuerpo está fatigado, podría refrescarse en el Jalón, que hielan sus aguas.
(...)
A la muerte de Domiciano volvió a su tierra y continuó cantando sus excelencias, pese a que también añoraba Roma y sus ambientes refinados.
El Papa Luna
Pedro Martínez de Luna, nacido en Illueca en 1328, destacó como mecenas de las artes en Aragón.
Fue nombrado Papa de Aviñón, bajo el nombre de Benedicto XIII, durante el Cisma que se produjo en la iglesia a la muerte de Clemente VII.
Baltasar Gracián
El que fue uno de los más notables eruditos del Barroco español nació en 1601 en la localidad de Belmonte, próxima a Calatayud.
Ingresó en la Compañía de Jesús, completó los estudios de Filosofía y Teología en Calatayud y Zaragoza, y ejerció posteriormente como docente.
Su defensa de la razón y de la cultura como directrices del comportamiento humano le supuso entrar en conflicto con algunos de sus obras.
Entre sus obras destacan El Criticón, Agudeza o Arte de Ingenio, El Político, El Discreto y Oráculo manual.
Su fama data de la época romana. Ya el poeta Marcial mencionaba los Aquae Bilbilitanorum.
Durante la Edad Media continuaron explotándose sus propiedades curativas.
En el siglo XIX alcanzaron su apogeo.
Tras décadas de crisis han sido modernizados y están volviendo a vivir una época dorada.
En Alhama de Aragón: Termas Pallarés (con lago natural de aguas termales), Balneario Cantarero y Termas de San Roque.
En Jaraba: Baños de Serón, Balneario Sicilia y Balneario La Virgen.
En Paracuellos de Jiloca: Balneario de Paracuellos.
San Blas (Ateca). 2 y 3 de febrero. El símbolo de la fiesta es la Máscara de Ateca, un personaje que el 3 de febrero, tras la misa mayor en la ermita de San Blas, inicia su ascenso al cerro donde le esperan los jóvenes del pueblos. Va vestido con traje a rayas rojas y amarillas, del que cuelgan cascabeles, y lleva un sable y un escudo para defenderse de los chicos que le persiguen para arrancarle uno de sus cascabeles.
San Juan Lorenzo (Cetina). 19 de mayo. Una hora antes de la medianoche se representa la Contradanza de Cetina, un original baile que protagonizan el Diablo y la Muerte, de origen muy antiguo (quizá prerromano según algunos) y del que hay ya constancia documental en los siglos XVII y XVIII. Ocho de los participantes (cuatro de blanco y cuatro de negro) van con el rostro tapado, llevan en sus vestidos unos dibujos que les dan la apariencia de esqueletos y simbolizan la Muerte. El noveno, con traje rojo y la cara descubierta y pintada, representa al Diablo. Todos llevan antorchas en la mano y adornos florales. Ejecutan una serie de unos treinta pasos o mudanzas de una gran espectacularidad, dirigidos por el Diablo.
San Roque (Calatayud). 13 a 16 de agosto.
Rosario de Cristal de Calatayud. 8 de septiembre. En honor a la Virgen de la Peña.
Procesión del Santo Entierro de Calatayud. Viernes Santo. Es un originalísimo auto sacramental del siglo XV.
Cristo de Ribota. 1 de mayo. Entre Calatayud y Torralba.
Jesús del Monte (Aniñón). Segundo domingo de mayo.
Virgen del Semón o de las Aguas. Todos los domingos de mayo. El primero acuden los vecinos de Olvés, el segundo los de Acered, el tercero los de Alarba, el cuarto los de Castejón y el quinto (cuando lo hay) los de los cuatro pueblos juntos.
Fue fundada por los musulmanes en el año 716, en las estribaciones de la Mesa de Armantes, con el nombre de Qal'at Ayyub.
Dentro del amplio recinto defensivo que construyeron los musulmanes se desarrollaron la ciudad cristiana y una importante aljama judía.
Desde 1366, completada ya la Reconquista de la comarca por los cristianos, ostenta el título de ciudad.
Plaza del Fuerte
Hace de nexo entre el casco histórico y la parte nueva de la ciudad.
En sus inmediaciones se encuentra un interesante conjunto de edificios monumentales levantados por la Compañía de Jesús:
Colegiata de Santa María la Mayor
Es uno de los monumentos mudéjares más destacados de Aragón.
Torre octogonal, portada tallada en alabastro por Esteban de Obray y Juan de Talavera (s. XVI), y claustro gótico-mudéjar, con elementos de los siglos XIV y XV.
Plaza Mayor
Es de origen medieval, aunque ha sido muy modificada en épocas posteriores, y se halla porticada. Su edificio más representativo es la casa consistorial (siglo XVII).
Mesón de la Dolores
Es una típica hospedería o posada aragonesa del siglo XIX, construida sobre un palacio renacentista y reformada a fines del siglo XIX.
Se encuentra en la plaza de los Mesones.
Fue escenario de la popular leyenda de la Dolores, que está inspirada en una copla anónima y pícara (Si vas a Calatayud / pregunta por la Dolores, / que es una moza muy guapa / y amiga de hacer favores), a la que el escritor bilbilitano Feliu y Codina dio forma literaria y a la que el compositor Tomás Bretón puso música en una famosa ópera.
En las antiguas caballerizas se ha instalado un museo con documentos, datos y curiosidades sobre la Dolores y su tiempo.
Colegiata del Santo Sepulcro
Es un templo de sobria figura y estilo herreriano, obra de Gaspar de Villaverde (siglo XVII).
Iglesia de San Pedro de los Francos
Torre desmochada, portada gótica y ábside mudéjar.
Aquí se juró príncipe heredero de la Corona de Aragón a Fernando el Católico y en 1978 se constituyeron las primeras Cortes de Aragón tras la dictadura franquista.
Iglesia de San Andrés
Torre mudéjar de gran belleza y tres naves.
La parte más antigua del templo fue probablemente una mezquita.
Judería
Se asentaba en la parte alta de la ciudad, a los pies del castillo de Doña Martina, por los barrancos de Soria y del Puente Seco. Se calcula que a finales del siglo XII la comunidad judía que vivía aquí ascendía a unas mil personas.
Hoy día aún se conserva el trazado de las calles y la disposición de las casas, formando angostos espacios.
La iglesia de Nuestra Señora de la Consolación fue en otro tiempo sinagoga mayor. Su actual interior es barroco (siglo XVII).
La antigua sinagoga de tejedores o hiladores es hoy una bodega y presenta planta rectangular, con bóveda de cañón apuntada. y mampostería de yeso, reforzada por varios arcos fajones de ladrillo.
Callejeando pueden descubrirse muchos más edificios monumentales, palacios y rincones con encanto.
Conjunto fortificado islámico
Se trata de un recinto amurallado compuesto por cinco castillos y largos lienzos de murallas. Data de los siglos VIII y IX.
El Castillo Mayor o de Ayyub es el más destacado por su posición y tamaño. Lo acompañan los castillos de Doña Martina, del Reloj y de la Torre mMocha, y los restos del castillo de la Peña.
El conjunto se halla bastante deteriorado, dada la erosionabilidad de los materiales con que se construyó, principalmente yesos blancos.
Alhama de Aragón
Iglesia parroquial (siglo XVII) con yeserías barroco-mudéjares.
Tres balnearios y un lago natural de aguas termales (con una temperatura entre 34 y 37 grados centígrados).
Ariza
Conserva un rico patrimonio vinculado al señorío de los Palafox.
Iglesia parroquial de estilo gótico tardío, realizada íntegramente en piedra, que guarda dos bellas estatuas de los marqueses de Palafox, hechas de alabastro.
Casa-palacio de los Palafox (siglo XVIII).
Convento de San Francisco.
Ateca
En su término se encontraba el mítico Alcocer, donde tuvo lugar una batalla mencionada en el Cantar del Mío Cid.
Ayuntamiento renacentista.
Torre mudéjar de Santa María (siglo XVIII).
Torre del Reloj (siglo XVI).
Antiguas puertas de la villa.
Castillo-fuerte de origen medieval.
Casas-palacio.
Convento de Capuchinos e iglesia de San Francisco (siglo XVII).
Bordalba
Iglesia de la Purísima Concepción, de estilo gótico y construida íntegramente en piedra.
Cetina
Grandioso castillo-palacio del siglo XIII, con capilla gótico-mudéjar en la que se casó Francisco de Quevedo en 1634.
Iglesia parroquial.
Ermita de San Juan Lorenzo, en cuyo honor se celebran el 19 de mayo las fiestas, famosas por la Contradanza que protagonizan la Muerte y el Diablo.
Embid de Ariza
Emplazada en un bello paraje con impresionantes cortados de roca caliza.
Junto al río se levanta la iglesia de la Asunción, con portada románica.
Fuera del pueblo se encuentran la ermita de Santa Quiteria y la inaccesible atalaya.
Monreal de Ariza
En la parte alta sobresalen los restos del castillo.
En su término se encuentran las ruinas de la ciudad celtíbera de Arcóbriga.
Pozuel de Ariza
Castillo de la Raya, cuyo nombre hace referencia a que se hallaba junto a la antigua frontera de los reinos de Aragón y Castilla.
Sisamón
Iglesia de San Martín.
El castillo muestra en uno de sus muros un escudo con los siete castillos que en su momento defendían la frontera de Aragón con Castilla.
Por un camino entre sabinas y campos de cereal se llega a la Torre del Moro.
Terrer
Torre mudéjar.
Chimeneas de la antigua fábrica azucarera.
Chocolates Caro.
Torrehermosa
Es cuna de San Pascual Bailón.
Calmarza
Pueden visitarse su escondida iglesia, la torre defensiva y los abandonados edificios de la fábrica de papel.
Campillo de Aragón
Cuenta con dos iglesias y los restos de un castillo fronterizo de época medieval.
En la parroquia se halla una réplica de la Sábana Santa, regalada al pueblo en 1653 por Lucas Bueno, uno de sus hijos más ilustres.
Carenas
A orillas del río se encuentran los restos de la ermita de San Sebastián y un molino, con un verde chaparral de fondo.
Castejón de las Armas
Su caserío aparece desperdigado a ambos lados del río, atravesado por un bello puente de piedra.
En la parte alta se encuentran la iglesia parroquial, la ermita y los restos del castillo.
Cimballa
Iglesia barroca y castillo fronterizo.
Embalse de La Tranquera
A él vierten sus aguas los ríos Piedra y Mesa.
A su orilla queda la bella ermita de San Daniel (siglo XVII).
Ibdes
Se levanta sobre un promontorio.
Entre el caserío sobresale la iglesia parroquial, de estilo gótico, que sorprende por su diáfano espacio interior.
En las laderas arcillosas se abren las bocas de numerosas cuevas, que en otro tiempo se usaron como viviendas; algunas sirven hoy de bodegas y corrales.
Puede visitarse la gruta de las Maravillas.
Jaraba
Cuenta con tres balnearios.
A un kilómetro, al pie de una pared rocosa, se localiza la ermita de la Virgen de Jaraba.
Monasterio de Piedra
Abadía cisterciense enclavada en un idílico paraje natural que ha formado el río Piedra.
El monasterio, fundado en 1195 en un lugar apartado, con abundante agua y vegetación, fue construido en estilo gótico, realizándose sucesivas ampliaciones en el Renacimiento y el Barroco. Su decadencia dio comienzo a partir de la exclaustración de los monjes y la desamortización de 1835. El conjunto quedó abandonado y sufrió expolio durante varios años hasta su adquisición en 1840 por la familia Muntadas, que lo destinó en primer lugar a su explotación ganadera y posteriormente a su explotación turística.
Al monasterio se accede por una torre-puerta fortificada.
La iglesia, parcialmente derruida, es de cruz latina, con tres naves y ábside poligonal. En su cripta están enterrados los abades del monasterio desde el siglo XVII.
El claustro, que funciona como centro distribuidor de las dependencias monásticas, consta de dos pisos, medieval el inferior y barroco el superior. En el ala este se ubican la sacristía, la sala capitular y el locutorio; en el ala sur, el refectorio, la cocina y el calefactorio; en el norte, la cilla (donde se ubica actualmente el Museo del Vino de la Denominación de Origen de Calatayud) y la portería.
El magnífico parque natural que rodea a la abadía incluye un sistema de cascadas y cuevas de gran belleza que el río Piedra ha modelado.
Monterde
Esbelta torre mudéjar.
En lo alto se levanta la ermita de la Virgen del Castillo, que guarda un retablo gótico procedente del Monasterio de Piedra.
Munébrega
Su iglesia cuenta con un interesante museo de arte sacro, que también ofrece información sobre los personajes ilustres de la localidad (siete obispos, tres arzobispos, un cardenal, enbajadores reales, capitanes, un justicia de Aragón, escritores y pintores) pertenecientes a linajes como los Fernández de Heredia, los Martínez del Villar o los Lobera.
Juan Fernández de Heredia (1310-1396) fue consejero de Pedro IV y Gran Maestre de la Orden de San Juan de Jerusalén, desarrollando también una gran labor cultural, con una ingente obra de traducción y compilación histórica.
Fray Julián Garcés (1452-1547), que pertenecía a la Orden de los Predicadores, fue enviado en 1529 como obispo a la diócesis de Tlaxcala (México), donde se dedicó a la protección de los indios y a la fundación de hospitales y templos.
Nuévalos
Se levanta sobre una colina, con su iglesia renacentista y un torreón medieval cubierto de hiedra.
Aniñón
Imponente iglesia del siglo XVI, que se halla encaramada en lo alto del pueblo.
En un antiguo molino se ha instalado el Centro de Interpretación del Aceite.
Berdejo
Iglesia parroquial (siglo XVII), con ábside románico.
Casa consistorial renacentista.
Bijuesca
Iglesia parroquial barroca, con restos románicos.
Ermita de la Virgen del Castillo.
Fuente de los Caños.
Cervera de la Cañada
La iglesia de Santa Tecla presenta un exterior sobrio y un rico interior que ha conservado su decoración mudéjar original, compuesta de bellos esgrafiados de principios del siglo XV, ejecutados por el maestro Mahoma Rami, que forman trazos mixtilíneos de color crema, rojo y azul en los muros, así como de yeserías de lazo en los ventanales y un hermoso alfarje (artesonado) policromado.
Clarés
Iglesia barroca, con interesantes pinturas murales en su ábside semicircular.
Malanquilla
Curioso molino de viento rehabilitado.
Moros
Casco urbano de casas esbeltas y apiñadas, hechas de tapial.
Iglesia de Santa Eulalia, de influencia mudéjar.
Restos del castillo.
Torralba de Ribota
Hermosa iglesia-fortaleza (siglo XIV), en cuyo interior destacan tres valiosos retablos góticos procedentes del taller de los Arnaldín y dedicados a San Félix, San Andrés apóstol y San Martín de Tours, con escenas polícromas en las que se narran las vidas de los santos, ejecutadas al temple sobre pan de oro. Hay un calvario, también gótico, con expresivas tallas.
Torrelapaja
Tiene cierto aire castellano.
Cuenta con una iglesia tardo-gótica.
El Hospital de San Millán (siglo XVI) es una casa palacio de estilo renacentista que lleva el nombre del santo que según la tradición nació aquí.
Torrijo de la Cañada
Entre su patrimonio se cuentan tres iglesias (entre ellas la de Nuestra Señora del Hortal), varias casas nobles, una torre-puerta, un puente medieval y un castillo.
En la parte alta del pueblo el terreno está perforado por numerosas bodegas.
Villalengua
Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, de portada barroca y grandioso interior, que da a la Plaza Mayor.
Villarroya de la Sierra
De sus fortificaciones medievales quedan la torre del Rey y la torre de la Reina.
La iglesia parroquial de San Pedro (siglo XV) guarda una expresiva talla del Santo Cristo.
En los alrededores del pueblo hay un alfar romano y varias ermitas, destacando la de la Virgen de la Sierra.
Fuentes de Jiloca
Atractiva estructura urbana, con estrechas callejuelas en cuesta.
Iglesia-fortaleza (siglo XVI), que combina ladrillo y piedra en su fábrica. Interior diáfano, con esbeltos pilares.
Maluenda
Centro vitícola.
Cuenta con un rico patrimonio mudéjar.
Iglesia de San María (siglos XIV-XVI), que tiene una techumbre mudéjar con inscripciones en árabe.
Iglesia de las Santas Justa y Rufina, que conserva magníficos retablos de pintura gótica y un púlpito mudéjar.
Convento de Carmelitas (siglos XVII).
Junto a los restos del castillo musulmán (siglo X) se encuentran las ruinas de la iglesia mudéjar de San Miguel.
Montón
Iglesia gótica.
Restos de la muralla medieval y dos torreones.
Morata de Jiloca
Iglesia de San Martín de Tours, con espectacular fachada mudéjar.
Palacio renacentista.
Olvés
Iglesia parroquial casi en ruinas.
Ermita de la Virgen del Milagro, que conserva yeserías mudéjares.
Paracuellos de Jiloca
En la zona alta se levantan la iglesia de San Miguel y los restos del castillo musulmán.
En la zona baja, la ermita barroca de Santa María y el balneario de aguas termales.
Villafeliche
Sus pobladores fueron mayoritariamente moriscos hasta 1610 y por ello las huellas musulmanas son muy evidentes.
Destacan la iglesia del siglo XVII, el castillo que domina el valle del Jiloca y un curioso calvario con pequeñas capillas de enterramiento, que estuvo en uso hasta 1960.
La industria de la pólvora tuvo gran importancia en los siglos XVIII y XIX. Aún se dice que Arde mejor que la pólvora de Villafeliche. Llegó a haber entre 150 y 200 molinos de pólvora en funcionamiento, ubicados en las orillas del río Jiloca para aprovechar la fuerza de sus aguas. En la fabricación de la pólvora se utilizaban salitre (traído de Épila y otras localidades a orillas del Jalón), azufre (procedente de las minas de Villel, en Teruel) y carbón vegetal (producido en las cercanías de Villafeliche). En 1831 fue prohibida la actividad pero a comienzos del siglo XX volvió a recuperarse y funcionó hasta que en la década de los ochenta cerró la última factoría de pólvora por motivos de seguridad. En la Plaza Mayor hay un monumento a los trabajadores de la pólvora. Uno de los antiguos molinos de pólvora se ha restaurado y convertido en pequeño museo.
Belmonte de Gracián
Es lugar de nacimiento del escritor Baltasar Gracián, cuya estatua preside la entrada a la iglesia barroca de San Miguel, con hermosa torre mudéjar del siglo XIV.
En lo alto del pueblo se halla la iglesia de la Virgen del Castillo, edificada sobre los restos de una fortaleza medieval.
Próximo está el yacimiento celtíbero de Segeda (siglo II a. C.).
Codos
Perteneció a la Orden del Santo Sepulcro de Calatayud.
Su laberíntico casco urbano recuerda su origen medieval, destacando la iglesia de Santa María Magdalena (siglo XVII), que se encuentra en la parte alta, y un interesante museo arqueológico, que se ubica en una casa tradicional rehabilitada.
El Frasno
Aquí fue engendrado Fernando el Católico según la tradición popular.
En plena sierra de Vicor se encuentra la ermita de la Virgen de Pietas, con una bella talla mariana.
Mara
Iglesia de San Andrés, con bella torre mudéjar de ladrillo.
Las ermitas de San Fabián y San Sebastián se encuentran en parajes pintorescos.
Miedes
Es la mayor población del valle de Perejiles.
En su centro se levanta una torre gótica (siglo XIV), que es única en la comarca y fue construida durante la guerra de los Pedros. Contrasta con las típicas torres mudéjares.
Sobresalen también la iglesia parroquial, varios palacios y el imponente Convento de la Concepción (siglo XVII).
Tobed
Perteneció a la Orden del Santo Sepulcro de Calatayud y cuenta con un rico patrimonio.
La iglesia-fortaleza de la Virgen (siglo XIV) es de estilo mudéjar. Su fachada está bellamente decorada en ladrillo y cerámica vidriada. Destacan también las yeserías de su interior.
Subida a Los Castillos y la Cruz de Armantes (966 m.) desde Calatayud
Longitud: 22 km. (ida y vuelta) desde Calatayud; 17,5 km. desde el Azud Sagrado (una impresionante obra de ingeniería realizada por los árabes en el siglo X).
Desnivel: unos 400 m. desde Calatayud.
Se sale de Calatayud por la antigua carretera de Soria, dejando a la derecha la subida al castillo de Ayub.
Los Castillos son unas atractivas y caprichosas formaciones, modeladas en las arcillas y yesos por la erosión.
Desde la Cruz de Armantes se tiene una amplia panorámica de los valles del Ribota y del Manubles.
Vegetación: pinar de repoblación (en su mayoría pino carrasco), sabinas, enebros y plantas de escaso porte (aliaga, ontina, espliego, romero, tomillo y retama).
Sierra de Armantes (por el Club Alpino Universitario de Zaragoza)
La muerte sobre Armantes
Es el título de una novela del escritor bilbilitano José Verón Gormaz, con la que obtuvo en 1982 el premio San Jorge.
Relata el enfrentamiento entre dos pueblos antiguos, los Terrones y los Espigos, dos civilizaciones que desconocen la existencia de la rueda, pero que han alcanzado un desarrollo tecnológico impensable. Sus armas más mortíferas son los espejos colocados en la sierra de Armantes.
La trama entremezcla los lugares y los personajes tomados de la realidad con la ficción.
El pico del Rayo (1.427 m.) es la máxima altura de la sierra de Vicor, que se eleva entre los valles de los ríos Grío y Perejiles. En su cumbre hay vértice geodésico y puesto de vigilancia de incendios.
Se puede iniciar la ascensión en el albergue municipal y aula de la naturaleza de la Sierra de Vicor, ubicado en una antigua casa forestal y gestionado por el ayuntamiento de Calatayud, al que se accede por pista que arranca de la antigua N-II, un poco antes de alcanzar el Puerto Cavero.
Longitud: 13 km.
Desnivel: casi 600 m.
La ruta hace un bucle a partir de la fuente de Valdepajares o del Maestro, bordeando el pico de la Nevera (1.411 m.), en el que se ubican unas instalaciones del Ejército del Aire.
En la vertiente norte de la sierra de Vicor hay dos refugios de montaña, el de la Fuente Genaro y el de Inogés.
Vegetación: se alternan pinar y encinar, con pinos de varias especies (silvestre, carrasco y negro); hay también sauces, cerezos silvestres, espinos, zarzas, etc.; en la vertiente norte de la sierra se encuentran acebos.
Se eleva a 1.490 m. de altitud, en el punto culminante de la Sierra de la Virgen.
Puede pernoctarse en él si previamente se ha acordado en la parroquia de Villarroya.
Alrededor del santuario hay antenas y un puesto de vigilancia de incendios.
Puede ascenderse desde Aniñón o desde Villarroya. En ambos pueblos se elaboran mantecados al estilo tradicional.
El río Jalón serpentea durante casi 16 km. entre las paredes de cuarcitas y pizarras que forman las sierras de la Virgen y de Vicor.
En los cortados y roquedos anidan los buitres leonados y otras especies de rapaces (alimoches, águilas reales, águilas perdiceras, halcones peregrinos, etc.).
Un posible itinerario, de unos 14,5 km., es el que une las localidades de Embid de la Ribera, Paracuellos de la Ribera, Saviñán, Morés y Purroy. De Embid a Paracuellos se sigue el GR 90.2 o Sendero Ibérico Zaragozano (4 km.); de Paracuellos a Saviñán, el SL-Z 59 (2,5 km.); de Saviñán a Morés, el SL-Z 26 (5,5 km.); de Morés a Purroy, el SL-Z 18 (2,5 km.).
De Huerméda puede también subirse al puntal o mirador de La Cocha (990 m.), siguiendo el SL-Z 41. Es una ruta circular de 12,5 km. y 470 m. de desnivel.
Un paseo corto es el que lleva desde las inmediaciones del puerto de Campiel a la Peña de la Mora. Medio kilómetro antes de llegar al puerto de Campiel sale a mano derecha un antiguo camino. Aquí puede aparcarse el coche.
Es una laguna endorreica (quiere decir que no tiene desagüe), formada a consecuencia de un hundimiento tectónico. Su endorreismo hace que las aguas sean extremadamente salinas (105 gramos de sal por litro) y que no críen peces continentales.
En años muy lluviosos llega a alcanzar siete km. de longitud, tres km. de anchura y dos metros y medio de profundidad.
Se recomienda su visita de noviembre a finales de febrero, que es la época en que unas 60.000 grullas procedentes del norte de Europa la eligen como lugar para invernar.
La localidad de Gallocanta se encuentra a 57 km. de Valtorres.
Artículo de Andrés Campos en El País
Artículo en el blog Identidad Aragonesa
Artículo en Red Aragón
El grupo aragonés de música acústica y tradicional Lahiez ha grabado dos discos inspirados en las grullas de Gallocanta, titulados Concierto para Grullas, Grallas y Grillos (2000), y Rumbo al Horizonte (2006).
Se encuentra en la vertiente sureste de la Sierra del Moncayo y alberga una colonia de buitres muy numerosa.
El río Valdeplata nace en las Peñas de Herrera y desemboca en el río Isuela.
Al remontar el barranco desde el kilómetro 32 de la carretera de Calcena a Trasobares se pasa por las minas de Valdeplata.
La localidad de referencia es Calcena (a 73 km. de Valtorres).
Ver páginas 63 y 64 de la Guía montañera del Moncayo. Jesús Vallés. Editorial Sua.
Ver ruta nº 39 del libro Andar por las sierras y barrancos de la zona centro. José Luis Cepillo. Ediciones Penthalon.
Bibliografía
Comunidad de Calatayud y el Monasterio de Piedra. Colección Rutas CAI por Aragón, nº 12. Publicado en 2004 por CAI y Prames.
Red de senderos de la Comunidad de Calatayud. Publicado en 2010 por Prames. Incluye libro-guía y carpeta con 5 mapas individuales.
Artículos
Iglesias-fortaleza al sur del Ebro: Viaje por la frontera sagrada, entre Calatayud y Daroca (El País, abril de 2006)
Un fantástico reino pétreo: A pie por el cañón del río Mesa (El País, febrero de 2005)
Las históricas termas de Pallarés, en Alhama de Aragón (El País, diciembre de 2012)
Folletos
Rutas de senderismo y BTT por la Comarca de Calatayud
Por la fértil vega y la rocosa aridez del Alto Jalón
Guía de albergues de la Comarca de Calatayud
Las arcillas, de tonos rojizos, alternan con las calizas y con el verdor de la vegetación en el Alto Jalón, en el Monegrillo y en el curso alto de los ríos Piedra y Mesa.
Las pizarras, de tonos metálicos, dominan en el Grío y en la cubeta del Frasno.
Las calizas adquieren en algunas zonas formas agrestes y caprichosas, moldeadas por la acción del agua, como las chimeneas de hadas de Ibdes, las cercanías de Alhama o Embid de Ariza, los cañones de Calmarza y Jaraba en el río Mesa, el tramo del río Jalón entre Huérmeda y Embid de Ariza o el tramo del río Manubles en las proximidades de Bijuesca.
Las cuarcitas afloran en zonas de cumbres.
A veces calizas y cuarcitas se entremezclan, dando lugar a paisajes complejos y de gran belleza.
Vivienda tradicional
Se distribuye en dos alturas y bodega.
La planta baja tiene patio y corral; la primera planta, cocina, sala y alcobas.
Bajo el tejado existe un entrepiso con granero y a veces con solanar.
En la fachada suele haber un banco de obra (o cantón).
Preferentemente se construía en adobe o tapial, con zócalos y esquinas en piedra, aunque también hay ejemplos realizados completamente en piedra.
Los muros se encalaban al exterior y al interior, en blanco o azul.
Las ventanas eran pequeñas con objeto de protegerse del frío.
Los suelos se recubrían con empedrado en los patios y con yeso fino o baldosa roja en las habitaciones.
La arquitectura popular del valle de Perejiles presenta algunos rasgos particulares. Se utilizaba un singular aparejo de construcción, a base de bloques cuadrados de yeso, asentados con mortero. Eran conocidos popularmente como losas y se empleaban en la construcción de viviendas y pajares, disponiéndolos sobre un zócalo de piedra sillar. Generalmente se enlucía el conjunto para darle un aspecto uniforme. La piedra de yeso, de un característico color grisáceo, aflora en los montes de la zona. Existen buenos ejemplos de este tipo de construcción, única en la comarca, en Villalba de Perejil, Belmonte de Gracián y Mara, aunque actualmente ha caído en desuso.
Economía
Siguen practicándose la agricultura y la ganadería.
Uno de los principales soportes de la agricultura es el vino, con la denominación de origen Calatayud, aunque también destacan el cereal y los productos hortofrutícolas (la fruta del Jalón tuvo ya fama en la Roma clásica y en el siglo XVIII era consumida incluso en la Corte).
En las sierras se dan cultivos como almendros y olivos; en terrenos más favorables, cerezos y vides.
Se han abandonado los antiguos huertos, las parcelas de pequeño tamaño y los campos de menor rendimiento, a los que solo se podía acceder con mulas, y se ha apostado por las explotaciones de mayor tamaño, susceptibles de ser mecanizadas.
En muchos lugares se encuentran en uso las acequias trazadas por los árabes (como en Villarroya o Aniñón); las de origen romano se han perdido casi por completo, aunque en las vegas del Jalón y del Jiloca aún se conserva el trazado de algunas.
Apuntes históricos
Celtíberos
Fundaron las ciudades de Bílbilis (cerca de Calatayud), Arcóbriga (en el término de Monreal de Ariza) y Segeda (entre Belmonte de Gracián y Mara).
Romanos
La Bílbilis romana se fundó sobre el primitivo núcleo celtíbero y contó con foro, teatro y termas. Uno de sus habitantes más ilustres fue el poeta Marcial, magistral e insuperado compositor de epigramas (pequeños poemas satíricos).
Dominación musulmana
Los musulmanes dominaron la comarca desde el año 714 hasta su reconquista por Alfonso I en 1120.
En el año 716 fundaron Qal'at Ayyub (hoy Calatayud), que pronto se convirtió en la ciudad más importante de la comarca.
Tras la reconquista muchos musulmanes emigraron pero otros, los mudéjares, se quedaron en la comarca.
En 1610 Felipe III decretó la expulsión de los moriscos. Aproximadamente 1.500 familias de la comarca de Calatayud se vieron forzadas a dejar sus tierras. La expulsión tuvo graves consecuencias en las poblaciones en que los moriscos eran mayoría, como Villafeliche o Terrer.
La huella dejada por los musulmanes es imborrable en muchos aspectos (topónimos, tradiciones, arte, urbanismo, sistemas de explotación agrícola, gastronomía, etc.).
Los judíos
Calatayud tuvo una comunidad judía importante, constituida como aljama desde el siglo XII.
Los judíos desarrollaron una intensa actividad comercial, artesanal e intelectual, permaneciendo en la ciudad hasta el edicto de expulsión de 1492. A partir de este momento los no convertidos tuvieron que emigrar y los judeoconversos mantuvieron en muchos casos sus antiguas prácticas religiosas en la clandestinidad.
El Cid Campeador
En el Cantar de Mío Cid se cuenta que el Cid atravesó el valle del Jalón en su destierro, pero no hay evidencias históricas de que así sea.
Lo que si está confirmado por fuentes históricas es que recorrió la zona a finales del siglo XI y conquistó Alcocer en la célebre batalla del mismo nombre.
Industrialización
En el siglo XIX llegaron los grandes avances, como el ferrocarril o la luz eléctrica, que mejoraron las condiciones de vida de los habitantes de la zona, aunque muchos pueblos quedaran al margen hasta bien entrado el siglo XX.
La industrialización se inicia a finales del XIX y cobra impulso a principios del XX, con la fundación de bodegas y la instalación de fábricas harineras, azucareras y papeleras.
Muchas líneas férreas y fábricas se vieron obligadas a cerrar, quedándonos un rico patrimonio industrial (estaciones de ferrocarril abandonadas, fábricas de esbeltas chimeneas, etc.) que debiera conservarse y readaptarse a nuevos usos.
Éxodo rural
A partir de la década de 1960, la emigración a la cabecera comarcal, a la capital de provincia o a otras regiones de España ha sido constante.
Yacimientos arqueológicos romanos
Bílbilis
Se encuentra unos 5 km. al noreste de Calatayud.
Impresiona su situación. Se halla emplazada a unos 700 metros de altitud, en lo alto de los cerros de Bámbola, Santa Bárbara y San Paterno, dominando las hoces del Jalón y la estratégica confluencia de los ríos Jalón y Ribota.
Era una ciudad de origen celtíbero, fundada por la tribu de los lusones. Tras su conquista por Roma, se convirtió en una ciudad totalmente romanizada en cuanto a su morfología urbana, organización y mentalidad. En ella nació el poeta Marcial. La ciudad romana se alzó sobre el primitivo asentamiento celtíbero y fue reurbanizada completamente, adaptándose el urbanismo a la topografía y conectándose las calles y los espacios públicos mediante terrazas, rampas y escaleras. Su muralla abrazaba 30 hectáreas. Roma le otorgó el nombre de Bílbilis Augusta y el privilegiado estatuto de municipio de ciudadanos romanos.
A la entrada del yacimiento hay un pequeño centro de interpretación .
Se recomienda visitar el Museo de Calatayud, en el que se exponen muchos restos, objetos y materiales arqueológicos hallados en las excavaciones de Bílbilis.
El foro, que era el centro de la vida urbana, se ubicaba sobre el cerro de Santa Bárbara y estaba coronado por un templo sobre podio, dedicado al culto imperial, al que se accedía por una gran escalera. La plaza se hallaba rodeada de pórticos y tiendas.
El teatro se construyó aprovechando la pendiente de la ladera. Tenía una capacidad de 4.500 espectadores. Se conservan parte del frente del escenario, la orquesta y buena parte de la cavea o graderío.
Las termas públicas, en la parte alta de la ciudad, están bastante bien conservadas. Sus estancias se hallaban decoradas con pinturas parietales y mosaicos en los suelos. El apodyterium (vestuario) da paso al frigidarium (sala de baños fríos), al tepidarium (sala templada) y al caldarium (sala caliente con calefacción de hipocausto bajo el suelo y por las paredes).
Arcóbriga
Es un yacimiento situado en la margen derecha del río Jalón, próximo a Monreal de Ariza.
Muchos de los materiales excavados se encuentran en el Museo Arqueológico Nacional y en el Museo Cerralbo, ambos en Madrid.
Era una ciudad de origen celtíbero, como denota su nombre y señaló Ptolomeo, aunque a partir del siglo I d. C se transformó en una ciudad totalmente romanizada, que estaba protegida mediante una doble muralla. Plinio la cita como ciudad dependiente de Caesaraugusta y sujeta a tributo. El Itinerarium de Antonino (o guía romana de caminos) sitúa en ella una mansio o etapa oficial en la vía entre Segontia y Aquae Bilbilitanorum.
De la ciudad celtíbera quedan solo restos de una necrópolis (siglos III-II a. C.).
De la ciudad romana se han conservado el foro con macellum (mercado), el templo de Mercurio, la basílica cívica y una fuente. Se aprecian también restos de un posible teatro, de un recinto termal de casi 700 metros cuadrados, situado en el noroeste del cerro, y de un praetorium o palacio de audiencias.
Segeda
Es un yacimiento que se encuentra entre Mara y Belmonte de Gracián.
Su nombre es celtíbero y alude a la victoria (el prefijo celta Seg-).
Se trata por tanto de otra ciudad de origen celtíbero, que adquirió gran importancia gracias a su situación y a su actividad metalúrgica (hierro y plata).
Fue la primera y última ciudad emisora de moneda en Celtiberia y es citada por autores como Apiano, Diodoro, Floro, Estrabón y Esteban de Bizancio.
Una ampliación ilegal de sus murallas originó la gran guerra con Roma en el año 154 a. C. El cónsul romano Nobilior, al frente de un ejército de 30.000 hombres, la tomó al asalto. Los segedenses se refugiaron entonces en tierras de los arévacos, eligieron como caudillo a Caro y el 23 de agosto del año 153 a. C. infligieron una derrota humillante a las legiones romanas. La guerra concluiría en el año 133 a. C. con la toma y destrucción de Numancia.
La ciudad fue abandonada y a pocos kilómetros de ella se alzó otra nueva siguiendo los patrones urbanísticos romanos, con amplio foso y muralla, pero sería destruida en el siglo I a. C., quizá por su apoyo a Sertorio durante la guerra civil romana, el cual saldría perdedor.
Arte mudéjar
Se trata de un arte cristiano de raíces islámicas, considerado por muchos una de las manifestaciones artísticas más originales de la Península Ibérica.
En la comarca de Calatayud son numerosas las iglesias construidas en este estilo entre los siglos XIII y XVI.
Se caracteriza por emplear materiales autóctonos (ladrillo, yeso, madera o cerámica vidriada) y combinarlos recreando formas vegetales, geométricas y caligráficas que son propias del arte islámico.
Sus manifestaciones más características son las esbeltas torres de ladrillo, que van desde los ejemplos más primitivos y puros de los siglos XIII y XIV (Ateca, Belmonte, Aniñón y Terrer) a los más tardíos del siglo XVI (San Andrés de Calatayud, Villafeliche y Fuentes de Jiloca), en los que se entremezclan los rasgos puramente mudéjares con el nuevo arte renacentista, aunque cabe también mencionar los alfarjes (o artesonados), las yeserías y los azulejos.
Una importante aportación del mudéjar local son las iglesias-fortaleza, que tienen planta rectangular, tribunas sobre las naves laterales y cabecera recta, compartimentada en tres capillas. Sus torres-contrafuerte les dan al exterior un aspecto de fortaleza militar. Los ejemplos más representativos son las iglesias de la Virgen en Tobed, de San Félix en Torralba de Ribota y de Santa Tecla en Cervera de la Cañada. Su fisonomía defensiva responde a la necesidad de dotarles de seguridad tras el estallido de la guerra de los Pedros, que enfrentó a Aragón y Castilla a mediados del siglo XIV.
San Félix de Torralba tiene tres hermosos retablos góticos, que narran las vidas de San Félix, San Andrés y San Martín de Tours, con escenas polícromas realizadas al temple sobre pan de oro.
Santa Tecla de Cervera de la Cañada conserva en su interior la decoración mudéjar original (esgrafiados en los muros, yeserías en los ventanales y artesonado en el techo).
Personajes
Marcial
El famoso poeta de la Antigüedad nació en la ciudad hispanorromana de Bílbilis.
Con solo 23 años, siendo emperador Nerón, se trasladó a Roma. Gracias a su ingenio excepcional y a su habilidad para componer poemas se ganó el favor de los emperadores Tito y Domiciano, hijos ambos de Vespasiano.
Sus obras más exitosas fueron el Libro de los espectáculos (doce libros de epigramas) y los breves poemarios titulados Xenia y Apophoreta. Mostró una maestría insuperada en la composición de epigramas, breves poemas satíricos que resultan muy interesantes para conocer la sociedad romana del siglo I d. C.
En total residió 34 años en la capital imperial, aunque sintió siempre una enorme nostalgia por su lejana tierra y por su río Jalón, a los que se refería desde Roma con versos cargados de amor:
A veces te sorprendes, Avito, de que yo hable sin cesar de pueblos lejanos y de que, envejecido en la ciudad latina, sienta sed del aurífero Tajo y de mi patrio Jalón y añore los humildes predios de mi colmada casería.
(...)
Paisanos míos, a los que Bílbilis Augusta engendra en el abrupto monte que baña el Jalón con sus rápidas aguas, ¿no os causa algún contento la radiante gloria de vuestro poeta?
(...)
No nos avergoncemos de cantar los nombres bárbaros de Bílbilis, ni el Jalón, en cuyas aguas se templan las armas de acero; ni el de Mediolum, cuyos habitantes manejan tan bien el arco, y si el cuerpo está fatigado, podría refrescarse en el Jalón, que hielan sus aguas.
(...)
A la muerte de Domiciano volvió a su tierra y continuó cantando sus excelencias, pese a que también añoraba Roma y sus ambientes refinados.
El Papa Luna
Pedro Martínez de Luna, nacido en Illueca en 1328, destacó como mecenas de las artes en Aragón.
Fue nombrado Papa de Aviñón, bajo el nombre de Benedicto XIII, durante el Cisma que se produjo en la iglesia a la muerte de Clemente VII.
Baltasar Gracián
El que fue uno de los más notables eruditos del Barroco español nació en 1601 en la localidad de Belmonte, próxima a Calatayud.
Ingresó en la Compañía de Jesús, completó los estudios de Filosofía y Teología en Calatayud y Zaragoza, y ejerció posteriormente como docente.
Su defensa de la razón y de la cultura como directrices del comportamiento humano le supuso entrar en conflicto con algunos de sus obras.
Entre sus obras destacan El Criticón, Agudeza o Arte de Ingenio, El Político, El Discreto y Oráculo manual.
Balnearios
Su fama data de la época romana. Ya el poeta Marcial mencionaba los Aquae Bilbilitanorum.
Durante la Edad Media continuaron explotándose sus propiedades curativas.
En el siglo XIX alcanzaron su apogeo.
Tras décadas de crisis han sido modernizados y están volviendo a vivir una época dorada.
En Alhama de Aragón: Termas Pallarés (con lago natural de aguas termales), Balneario Cantarero y Termas de San Roque.
En Jaraba: Baños de Serón, Balneario Sicilia y Balneario La Virgen.
En Paracuellos de Jiloca: Balneario de Paracuellos.
Fiestas
San Blas (Ateca). 2 y 3 de febrero. El símbolo de la fiesta es la Máscara de Ateca, un personaje que el 3 de febrero, tras la misa mayor en la ermita de San Blas, inicia su ascenso al cerro donde le esperan los jóvenes del pueblos. Va vestido con traje a rayas rojas y amarillas, del que cuelgan cascabeles, y lleva un sable y un escudo para defenderse de los chicos que le persiguen para arrancarle uno de sus cascabeles.
San Juan Lorenzo (Cetina). 19 de mayo. Una hora antes de la medianoche se representa la Contradanza de Cetina, un original baile que protagonizan el Diablo y la Muerte, de origen muy antiguo (quizá prerromano según algunos) y del que hay ya constancia documental en los siglos XVII y XVIII. Ocho de los participantes (cuatro de blanco y cuatro de negro) van con el rostro tapado, llevan en sus vestidos unos dibujos que les dan la apariencia de esqueletos y simbolizan la Muerte. El noveno, con traje rojo y la cara descubierta y pintada, representa al Diablo. Todos llevan antorchas en la mano y adornos florales. Ejecutan una serie de unos treinta pasos o mudanzas de una gran espectacularidad, dirigidos por el Diablo.
San Roque (Calatayud). 13 a 16 de agosto.
Rosario de Cristal de Calatayud. 8 de septiembre. En honor a la Virgen de la Peña.
Semana Santa
Procesión del Santo Entierro de Calatayud. Viernes Santo. Es un originalísimo auto sacramental del siglo XV.
Romerías
Cristo de Ribota. 1 de mayo. Entre Calatayud y Torralba.
Jesús del Monte (Aniñón). Segundo domingo de mayo.
Virgen del Semón o de las Aguas. Todos los domingos de mayo. El primero acuden los vecinos de Olvés, el segundo los de Acered, el tercero los de Alarba, el cuarto los de Castejón y el quinto (cuando lo hay) los de los cuatro pueblos juntos.
Calatayud
Fue fundada por los musulmanes en el año 716, en las estribaciones de la Mesa de Armantes, con el nombre de Qal'at Ayyub.
Dentro del amplio recinto defensivo que construyeron los musulmanes se desarrollaron la ciudad cristiana y una importante aljama judía.
Desde 1366, completada ya la Reconquista de la comarca por los cristianos, ostenta el título de ciudad.
Plaza del Fuerte
Hace de nexo entre el casco histórico y la parte nueva de la ciudad.
En sus inmediaciones se encuentra un interesante conjunto de edificios monumentales levantados por la Compañía de Jesús:
- Seminario de Nobles (s. XVIII): Hoy es sede de los Juzgados.
- Colegio de los Jesuitas (s. XVII): Tuvo a Baltasar Gracián como alumno. Hoy acoge la sede de la UNED.
- Iglesia de San Juan el Real: Su cúpula se apoya en pechinas decoradas con pinturas al fresco de Goya, en las que se representa a los Padres de la Iglesia.
Colegiata de Santa María la Mayor
Es uno de los monumentos mudéjares más destacados de Aragón.
Torre octogonal, portada tallada en alabastro por Esteban de Obray y Juan de Talavera (s. XVI), y claustro gótico-mudéjar, con elementos de los siglos XIV y XV.
Plaza Mayor
Es de origen medieval, aunque ha sido muy modificada en épocas posteriores, y se halla porticada. Su edificio más representativo es la casa consistorial (siglo XVII).
Mesón de la Dolores
Es una típica hospedería o posada aragonesa del siglo XIX, construida sobre un palacio renacentista y reformada a fines del siglo XIX.
Se encuentra en la plaza de los Mesones.
Fue escenario de la popular leyenda de la Dolores, que está inspirada en una copla anónima y pícara (Si vas a Calatayud / pregunta por la Dolores, / que es una moza muy guapa / y amiga de hacer favores), a la que el escritor bilbilitano Feliu y Codina dio forma literaria y a la que el compositor Tomás Bretón puso música en una famosa ópera.
En las antiguas caballerizas se ha instalado un museo con documentos, datos y curiosidades sobre la Dolores y su tiempo.
Colegiata del Santo Sepulcro
Es un templo de sobria figura y estilo herreriano, obra de Gaspar de Villaverde (siglo XVII).
Iglesia de San Pedro de los Francos
Torre desmochada, portada gótica y ábside mudéjar.
Aquí se juró príncipe heredero de la Corona de Aragón a Fernando el Católico y en 1978 se constituyeron las primeras Cortes de Aragón tras la dictadura franquista.
Iglesia de San Andrés
Torre mudéjar de gran belleza y tres naves.
La parte más antigua del templo fue probablemente una mezquita.
Judería
Se asentaba en la parte alta de la ciudad, a los pies del castillo de Doña Martina, por los barrancos de Soria y del Puente Seco. Se calcula que a finales del siglo XII la comunidad judía que vivía aquí ascendía a unas mil personas.
Hoy día aún se conserva el trazado de las calles y la disposición de las casas, formando angostos espacios.
La iglesia de Nuestra Señora de la Consolación fue en otro tiempo sinagoga mayor. Su actual interior es barroco (siglo XVII).
La antigua sinagoga de tejedores o hiladores es hoy una bodega y presenta planta rectangular, con bóveda de cañón apuntada. y mampostería de yeso, reforzada por varios arcos fajones de ladrillo.
Callejeando pueden descubrirse muchos más edificios monumentales, palacios y rincones con encanto.
Conjunto fortificado islámico
Se trata de un recinto amurallado compuesto por cinco castillos y largos lienzos de murallas. Data de los siglos VIII y IX.
El Castillo Mayor o de Ayyub es el más destacado por su posición y tamaño. Lo acompañan los castillos de Doña Martina, del Reloj y de la Torre mMocha, y los restos del castillo de la Peña.
El conjunto se halla bastante deteriorado, dada la erosionabilidad de los materiales con que se construyó, principalmente yesos blancos.
Alto Jalón aragonés
Alhama de Aragón
Iglesia parroquial (siglo XVII) con yeserías barroco-mudéjares.
Tres balnearios y un lago natural de aguas termales (con una temperatura entre 34 y 37 grados centígrados).
Ariza
Conserva un rico patrimonio vinculado al señorío de los Palafox.
Iglesia parroquial de estilo gótico tardío, realizada íntegramente en piedra, que guarda dos bellas estatuas de los marqueses de Palafox, hechas de alabastro.
Casa-palacio de los Palafox (siglo XVIII).
Convento de San Francisco.
Ateca
En su término se encontraba el mítico Alcocer, donde tuvo lugar una batalla mencionada en el Cantar del Mío Cid.
Ayuntamiento renacentista.
Torre mudéjar de Santa María (siglo XVIII).
Torre del Reloj (siglo XVI).
Antiguas puertas de la villa.
Castillo-fuerte de origen medieval.
Casas-palacio.
Convento de Capuchinos e iglesia de San Francisco (siglo XVII).
Bordalba
Iglesia de la Purísima Concepción, de estilo gótico y construida íntegramente en piedra.
Cetina
Grandioso castillo-palacio del siglo XIII, con capilla gótico-mudéjar en la que se casó Francisco de Quevedo en 1634.
Iglesia parroquial.
Ermita de San Juan Lorenzo, en cuyo honor se celebran el 19 de mayo las fiestas, famosas por la Contradanza que protagonizan la Muerte y el Diablo.
Embid de Ariza
Emplazada en un bello paraje con impresionantes cortados de roca caliza.
Junto al río se levanta la iglesia de la Asunción, con portada románica.
Fuera del pueblo se encuentran la ermita de Santa Quiteria y la inaccesible atalaya.
Monreal de Ariza
En la parte alta sobresalen los restos del castillo.
En su término se encuentran las ruinas de la ciudad celtíbera de Arcóbriga.
Pozuel de Ariza
Castillo de la Raya, cuyo nombre hace referencia a que se hallaba junto a la antigua frontera de los reinos de Aragón y Castilla.
Sisamón
Iglesia de San Martín.
El castillo muestra en uno de sus muros un escudo con los siete castillos que en su momento defendían la frontera de Aragón con Castilla.
Por un camino entre sabinas y campos de cereal se llega a la Torre del Moro.
Terrer
Torre mudéjar.
Chimeneas de la antigua fábrica azucarera.
Chocolates Caro.
Torrehermosa
Es cuna de San Pascual Bailón.
Valles del Piedra y del Mesa
Calmarza
Pueden visitarse su escondida iglesia, la torre defensiva y los abandonados edificios de la fábrica de papel.
Campillo de Aragón
Cuenta con dos iglesias y los restos de un castillo fronterizo de época medieval.
En la parroquia se halla una réplica de la Sábana Santa, regalada al pueblo en 1653 por Lucas Bueno, uno de sus hijos más ilustres.
Carenas
A orillas del río se encuentran los restos de la ermita de San Sebastián y un molino, con un verde chaparral de fondo.
Castejón de las Armas
Su caserío aparece desperdigado a ambos lados del río, atravesado por un bello puente de piedra.
En la parte alta se encuentran la iglesia parroquial, la ermita y los restos del castillo.
Cimballa
Iglesia barroca y castillo fronterizo.
Embalse de La Tranquera
A él vierten sus aguas los ríos Piedra y Mesa.
A su orilla queda la bella ermita de San Daniel (siglo XVII).
Ibdes
Se levanta sobre un promontorio.
Entre el caserío sobresale la iglesia parroquial, de estilo gótico, que sorprende por su diáfano espacio interior.
En las laderas arcillosas se abren las bocas de numerosas cuevas, que en otro tiempo se usaron como viviendas; algunas sirven hoy de bodegas y corrales.
Puede visitarse la gruta de las Maravillas.
Jaraba
Cuenta con tres balnearios.
A un kilómetro, al pie de una pared rocosa, se localiza la ermita de la Virgen de Jaraba.
Monasterio de Piedra
Abadía cisterciense enclavada en un idílico paraje natural que ha formado el río Piedra.
El monasterio, fundado en 1195 en un lugar apartado, con abundante agua y vegetación, fue construido en estilo gótico, realizándose sucesivas ampliaciones en el Renacimiento y el Barroco. Su decadencia dio comienzo a partir de la exclaustración de los monjes y la desamortización de 1835. El conjunto quedó abandonado y sufrió expolio durante varios años hasta su adquisición en 1840 por la familia Muntadas, que lo destinó en primer lugar a su explotación ganadera y posteriormente a su explotación turística.
Al monasterio se accede por una torre-puerta fortificada.
La iglesia, parcialmente derruida, es de cruz latina, con tres naves y ábside poligonal. En su cripta están enterrados los abades del monasterio desde el siglo XVII.
El claustro, que funciona como centro distribuidor de las dependencias monásticas, consta de dos pisos, medieval el inferior y barroco el superior. En el ala este se ubican la sacristía, la sala capitular y el locutorio; en el ala sur, el refectorio, la cocina y el calefactorio; en el norte, la cilla (donde se ubica actualmente el Museo del Vino de la Denominación de Origen de Calatayud) y la portería.
El magnífico parque natural que rodea a la abadía incluye un sistema de cascadas y cuevas de gran belleza que el río Piedra ha modelado.
Monterde
Esbelta torre mudéjar.
En lo alto se levanta la ermita de la Virgen del Castillo, que guarda un retablo gótico procedente del Monasterio de Piedra.
Munébrega
Su iglesia cuenta con un interesante museo de arte sacro, que también ofrece información sobre los personajes ilustres de la localidad (siete obispos, tres arzobispos, un cardenal, enbajadores reales, capitanes, un justicia de Aragón, escritores y pintores) pertenecientes a linajes como los Fernández de Heredia, los Martínez del Villar o los Lobera.
Juan Fernández de Heredia (1310-1396) fue consejero de Pedro IV y Gran Maestre de la Orden de San Juan de Jerusalén, desarrollando también una gran labor cultural, con una ingente obra de traducción y compilación histórica.
Fray Julián Garcés (1452-1547), que pertenecía a la Orden de los Predicadores, fue enviado en 1529 como obispo a la diócesis de Tlaxcala (México), donde se dedicó a la protección de los indios y a la fundación de hospitales y templos.
Nuévalos
Se levanta sobre una colina, con su iglesia renacentista y un torreón medieval cubierto de hiedra.
Valles del Ribota y del Manubles
Aniñón
Imponente iglesia del siglo XVI, que se halla encaramada en lo alto del pueblo.
En un antiguo molino se ha instalado el Centro de Interpretación del Aceite.
Berdejo
Iglesia parroquial (siglo XVII), con ábside románico.
Casa consistorial renacentista.
Bijuesca
Iglesia parroquial barroca, con restos románicos.
Ermita de la Virgen del Castillo.
Fuente de los Caños.
Cervera de la Cañada
La iglesia de Santa Tecla presenta un exterior sobrio y un rico interior que ha conservado su decoración mudéjar original, compuesta de bellos esgrafiados de principios del siglo XV, ejecutados por el maestro Mahoma Rami, que forman trazos mixtilíneos de color crema, rojo y azul en los muros, así como de yeserías de lazo en los ventanales y un hermoso alfarje (artesonado) policromado.
Clarés
Iglesia barroca, con interesantes pinturas murales en su ábside semicircular.
Malanquilla
Curioso molino de viento rehabilitado.
Moros
Casco urbano de casas esbeltas y apiñadas, hechas de tapial.
Iglesia de Santa Eulalia, de influencia mudéjar.
Restos del castillo.
Torralba de Ribota
Hermosa iglesia-fortaleza (siglo XIV), en cuyo interior destacan tres valiosos retablos góticos procedentes del taller de los Arnaldín y dedicados a San Félix, San Andrés apóstol y San Martín de Tours, con escenas polícromas en las que se narran las vidas de los santos, ejecutadas al temple sobre pan de oro. Hay un calvario, también gótico, con expresivas tallas.
Torrelapaja
Tiene cierto aire castellano.
Cuenta con una iglesia tardo-gótica.
El Hospital de San Millán (siglo XVI) es una casa palacio de estilo renacentista que lleva el nombre del santo que según la tradición nació aquí.
Torrijo de la Cañada
Entre su patrimonio se cuentan tres iglesias (entre ellas la de Nuestra Señora del Hortal), varias casas nobles, una torre-puerta, un puente medieval y un castillo.
En la parte alta del pueblo el terreno está perforado por numerosas bodegas.
Villalengua
Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, de portada barroca y grandioso interior, que da a la Plaza Mayor.
Villarroya de la Sierra
De sus fortificaciones medievales quedan la torre del Rey y la torre de la Reina.
La iglesia parroquial de San Pedro (siglo XV) guarda una expresiva talla del Santo Cristo.
En los alrededores del pueblo hay un alfar romano y varias ermitas, destacando la de la Virgen de la Sierra.
Valle del Jiloca
Fuentes de Jiloca
Atractiva estructura urbana, con estrechas callejuelas en cuesta.
Iglesia-fortaleza (siglo XVI), que combina ladrillo y piedra en su fábrica. Interior diáfano, con esbeltos pilares.
Maluenda
Centro vitícola.
Cuenta con un rico patrimonio mudéjar.
Iglesia de San María (siglos XIV-XVI), que tiene una techumbre mudéjar con inscripciones en árabe.
Iglesia de las Santas Justa y Rufina, que conserva magníficos retablos de pintura gótica y un púlpito mudéjar.
Convento de Carmelitas (siglos XVII).
Junto a los restos del castillo musulmán (siglo X) se encuentran las ruinas de la iglesia mudéjar de San Miguel.
Montón
Iglesia gótica.
Restos de la muralla medieval y dos torreones.
Morata de Jiloca
Iglesia de San Martín de Tours, con espectacular fachada mudéjar.
Palacio renacentista.
Olvés
Iglesia parroquial casi en ruinas.
Ermita de la Virgen del Milagro, que conserva yeserías mudéjares.
Paracuellos de Jiloca
En la zona alta se levantan la iglesia de San Miguel y los restos del castillo musulmán.
En la zona baja, la ermita barroca de Santa María y el balneario de aguas termales.
Villafeliche
Sus pobladores fueron mayoritariamente moriscos hasta 1610 y por ello las huellas musulmanas son muy evidentes.
Destacan la iglesia del siglo XVII, el castillo que domina el valle del Jiloca y un curioso calvario con pequeñas capillas de enterramiento, que estuvo en uso hasta 1960.
La industria de la pólvora tuvo gran importancia en los siglos XVIII y XIX. Aún se dice que Arde mejor que la pólvora de Villafeliche. Llegó a haber entre 150 y 200 molinos de pólvora en funcionamiento, ubicados en las orillas del río Jiloca para aprovechar la fuerza de sus aguas. En la fabricación de la pólvora se utilizaban salitre (traído de Épila y otras localidades a orillas del Jalón), azufre (procedente de las minas de Villel, en Teruel) y carbón vegetal (producido en las cercanías de Villafeliche). En 1831 fue prohibida la actividad pero a comienzos del siglo XX volvió a recuperarse y funcionó hasta que en la década de los ochenta cerró la última factoría de pólvora por motivos de seguridad. En la Plaza Mayor hay un monumento a los trabajadores de la pólvora. Uno de los antiguos molinos de pólvora se ha restaurado y convertido en pequeño museo.
Valles del Perejiles y del Grío
Belmonte de Gracián
Es lugar de nacimiento del escritor Baltasar Gracián, cuya estatua preside la entrada a la iglesia barroca de San Miguel, con hermosa torre mudéjar del siglo XIV.
En lo alto del pueblo se halla la iglesia de la Virgen del Castillo, edificada sobre los restos de una fortaleza medieval.
Próximo está el yacimiento celtíbero de Segeda (siglo II a. C.).
Codos
Perteneció a la Orden del Santo Sepulcro de Calatayud.
Su laberíntico casco urbano recuerda su origen medieval, destacando la iglesia de Santa María Magdalena (siglo XVII), que se encuentra en la parte alta, y un interesante museo arqueológico, que se ubica en una casa tradicional rehabilitada.
El Frasno
Aquí fue engendrado Fernando el Católico según la tradición popular.
En plena sierra de Vicor se encuentra la ermita de la Virgen de Pietas, con una bella talla mariana.
Mara
Iglesia de San Andrés, con bella torre mudéjar de ladrillo.
Las ermitas de San Fabián y San Sebastián se encuentran en parajes pintorescos.
Miedes
Es la mayor población del valle de Perejiles.
En su centro se levanta una torre gótica (siglo XIV), que es única en la comarca y fue construida durante la guerra de los Pedros. Contrasta con las típicas torres mudéjares.
Sobresalen también la iglesia parroquial, varios palacios y el imponente Convento de la Concepción (siglo XVII).
Tobed
Perteneció a la Orden del Santo Sepulcro de Calatayud y cuenta con un rico patrimonio.
La iglesia-fortaleza de la Virgen (siglo XIV) es de estilo mudéjar. Su fachada está bellamente decorada en ladrillo y cerámica vidriada. Destacan también las yeserías de su interior.
Sierra de Armantes
Subida a Los Castillos y la Cruz de Armantes (966 m.) desde Calatayud
Longitud: 22 km. (ida y vuelta) desde Calatayud; 17,5 km. desde el Azud Sagrado (una impresionante obra de ingeniería realizada por los árabes en el siglo X).
Desnivel: unos 400 m. desde Calatayud.
Se sale de Calatayud por la antigua carretera de Soria, dejando a la derecha la subida al castillo de Ayub.
Los Castillos son unas atractivas y caprichosas formaciones, modeladas en las arcillas y yesos por la erosión.
Desde la Cruz de Armantes se tiene una amplia panorámica de los valles del Ribota y del Manubles.
Vegetación: pinar de repoblación (en su mayoría pino carrasco), sabinas, enebros y plantas de escaso porte (aliaga, ontina, espliego, romero, tomillo y retama).
Los Castillos de Armantes
Sierra de Armantes (por el Club Alpino Universitario de Zaragoza)
La muerte sobre Armantes
Es el título de una novela del escritor bilbilitano José Verón Gormaz, con la que obtuvo en 1982 el premio San Jorge.
Relata el enfrentamiento entre dos pueblos antiguos, los Terrones y los Espigos, dos civilizaciones que desconocen la existencia de la rueda, pero que han alcanzado un desarrollo tecnológico impensable. Sus armas más mortíferas son los espejos colocados en la sierra de Armantes.
La trama entremezcla los lugares y los personajes tomados de la realidad con la ficción.
Pico del Rayo
El pico del Rayo (1.427 m.) es la máxima altura de la sierra de Vicor, que se eleva entre los valles de los ríos Grío y Perejiles. En su cumbre hay vértice geodésico y puesto de vigilancia de incendios.
Se puede iniciar la ascensión en el albergue municipal y aula de la naturaleza de la Sierra de Vicor, ubicado en una antigua casa forestal y gestionado por el ayuntamiento de Calatayud, al que se accede por pista que arranca de la antigua N-II, un poco antes de alcanzar el Puerto Cavero.
Longitud: 13 km.
Desnivel: casi 600 m.
La ruta hace un bucle a partir de la fuente de Valdepajares o del Maestro, bordeando el pico de la Nevera (1.411 m.), en el que se ubican unas instalaciones del Ejército del Aire.
En la vertiente norte de la sierra de Vicor hay dos refugios de montaña, el de la Fuente Genaro y el de Inogés.
Vegetación: se alternan pinar y encinar, con pinos de varias especies (silvestre, carrasco y negro); hay también sauces, cerezos silvestres, espinos, zarzas, etc.; en la vertiente norte de la sierra se encuentran acebos.
Santuario de la Virgen de la Sierra
Se eleva a 1.490 m. de altitud, en el punto culminante de la Sierra de la Virgen.
Puede pernoctarse en él si previamente se ha acordado en la parroquia de Villarroya.
Alrededor del santuario hay antenas y un puesto de vigilancia de incendios.
Puede ascenderse desde Aniñón o desde Villarroya. En ambos pueblos se elaboran mantecados al estilo tradicional.
Hoces del Jalón
El río Jalón serpentea durante casi 16 km. entre las paredes de cuarcitas y pizarras que forman las sierras de la Virgen y de Vicor.
En los cortados y roquedos anidan los buitres leonados y otras especies de rapaces (alimoches, águilas reales, águilas perdiceras, halcones peregrinos, etc.).
Un posible itinerario, de unos 14,5 km., es el que une las localidades de Embid de la Ribera, Paracuellos de la Ribera, Saviñán, Morés y Purroy. De Embid a Paracuellos se sigue el GR 90.2 o Sendero Ibérico Zaragozano (4 km.); de Paracuellos a Saviñán, el SL-Z 59 (2,5 km.); de Saviñán a Morés, el SL-Z 26 (5,5 km.); de Morés a Purroy, el SL-Z 18 (2,5 km.).
De Huerméda puede también subirse al puntal o mirador de La Cocha (990 m.), siguiendo el SL-Z 41. Es una ruta circular de 12,5 km. y 470 m. de desnivel.
Un paseo corto es el que lleva desde las inmediaciones del puerto de Campiel a la Peña de la Mora. Medio kilómetro antes de llegar al puerto de Campiel sale a mano derecha un antiguo camino. Aquí puede aparcarse el coche.
Laguna de Gallocanta
Es una laguna endorreica (quiere decir que no tiene desagüe), formada a consecuencia de un hundimiento tectónico. Su endorreismo hace que las aguas sean extremadamente salinas (105 gramos de sal por litro) y que no críen peces continentales.
En años muy lluviosos llega a alcanzar siete km. de longitud, tres km. de anchura y dos metros y medio de profundidad.
Se recomienda su visita de noviembre a finales de febrero, que es la época en que unas 60.000 grullas procedentes del norte de Europa la eligen como lugar para invernar.
La localidad de Gallocanta se encuentra a 57 km. de Valtorres.
Artículo de Andrés Campos en El País
Artículo en el blog Identidad Aragonesa
Artículo en Red Aragón
El grupo aragonés de música acústica y tradicional Lahiez ha grabado dos discos inspirados en las grullas de Gallocanta, titulados Concierto para Grullas, Grallas y Grillos (2000), y Rumbo al Horizonte (2006).
Barranco de Valdeplata
Se encuentra en la vertiente sureste de la Sierra del Moncayo y alberga una colonia de buitres muy numerosa.
El río Valdeplata nace en las Peñas de Herrera y desemboca en el río Isuela.
Al remontar el barranco desde el kilómetro 32 de la carretera de Calcena a Trasobares se pasa por las minas de Valdeplata.
La localidad de referencia es Calcena (a 73 km. de Valtorres).
Ver páginas 63 y 64 de la Guía montañera del Moncayo. Jesús Vallés. Editorial Sua.
Ver ruta nº 39 del libro Andar por las sierras y barrancos de la zona centro. José Luis Cepillo. Ediciones Penthalon.
Bibliografía
Comunidad de Calatayud y el Monasterio de Piedra. Colección Rutas CAI por Aragón, nº 12. Publicado en 2004 por CAI y Prames.
Red de senderos de la Comunidad de Calatayud. Publicado en 2010 por Prames. Incluye libro-guía y carpeta con 5 mapas individuales.
Artículos
Iglesias-fortaleza al sur del Ebro: Viaje por la frontera sagrada, entre Calatayud y Daroca (El País, abril de 2006)
Un fantástico reino pétreo: A pie por el cañón del río Mesa (El País, febrero de 2005)
Las históricas termas de Pallarés, en Alhama de Aragón (El País, diciembre de 2012)
Folletos
Rutas de senderismo y BTT por la Comarca de Calatayud
Por la fértil vega y la rocosa aridez del Alto Jalón
Guía de albergues de la Comarca de Calatayud
Enlaces
Club de Montaña de Calatayud
Trenes
Varios AVEs y Alvias al día a Calatayud.
Un Regional Exprés, que sale a las 8:07 de Chamartín y para en Arcos de Jalón, Ariza y Calatayud.
Un Regional, que sale a las 15:45 de Chamartín y para en Arcos de Jalón, Santa María de Huerta, Ariza, Cetina, Alhama de Aragón, Ateca, Calatayud, Paracuellos, Saviñán y Morés.
Trenes
Varios AVEs y Alvias al día a Calatayud.
Un Regional Exprés, que sale a las 8:07 de Chamartín y para en Arcos de Jalón, Ariza y Calatayud.
Un Regional, que sale a las 15:45 de Chamartín y para en Arcos de Jalón, Santa María de Huerta, Ariza, Cetina, Alhama de Aragón, Ateca, Calatayud, Paracuellos, Saviñán y Morés.
Albergue Municipal de Cervera de la Cañada
Situación: A 247 km. de Madrid, en la comarca de Calatayud.
Provincia: Zaragoza.
Contacto: Elena (móvil: 642.222.594).
El albergue ocupa el edificio de la antigua escuela y lleva solo 3 años abierto.
Capacidad: 20 plazas en 2 dormitorios con literas. Tienen ropa de cama (sábanas y edredón) y no hay que llevar saco.
Otros servicios: Tres baños. Cocina equipada con menaje y vajilla.
Tarifas: 10 euros por persona y noche. Se puede alquilar completo. No hace falta adelantar nada (no hay cta. cte. en la que hacer un ingreso) pero al llegar hay que entregar una fianza (en torno al 30 % del precio total).
Web
Web
Albergue Manubles (Torrijo de la Cañada )
Situación: A 236 km. de Madrid, en la comarca de Calatayud.
Provincia: Zaragoza.
Contacto: Mario (móvil: 629.119.271)
Capacidad: 26 plazas en habitaciones dobles con cama y en estancias de 6, 8 y 10 literas dobles. No hay que llevar saco, dejan
sábanas y mantas.
Otros servicios: Calefacción. Cocina equipada con cazuelas y
vajilla. Lavadora, frigorífico y congelador. Salón-comedor.
Tarifas: De 12 a 16 euros por persona
(según temporada).
Alquiler completo del albergue:
350 euros por una noche, 660 euros por dos y 900 por tres (lo están dejando a
500 euros por las dos noches de un fin de semana). Para reservar hay que ingresar un
30 % por adelantado (a una c/c).
Albergue Municipal Sierra de Vicor (Calatayud )
Situación: Ubicado en la antigua Casa de los Forestales, a unos 10 km. del pueblo (este último se encuentra a 230 km. de Madrid). Tiene dos plantas y buhardilla.
Provincia: Zaragoza.
Contacto: Elena (tf. ayuntamiento: 976-88.13.14); E-mail: emunoz@calatayud.es
Capacidad: 44 plazas en 3 dormitorios colectivos con literas y una buhardilla con camas (llevar saco).
Otros servicios: Calefacción y agua caliente. Comedor, sala multiusos con chimenea, cocina industrial totalmente equipada, baños compartidos, duchas y un dormitorio en la planta baja. Baños compartidos y dos dormitorios en la primera planta. Otro dormitorio en la buhardilla. Barbacoas en el exterior.
Se alquila entero
Se alquila entero
Tarifas (recogidas en la Ordenanza Municipal nº 31): 200 euros por noche de domingo a jueves; 300 euros por noche los sábados; 450 euros por noche los fines de semana. Se obtiene un descuento del 10 % por 2 ó más días consecutivos de ocupación. A los precios hay que sumarles IVA al 21 %.
Reserva: Para formalizarse se ha de pagar un 40 % del precio y una reserva de 225 euros; el 60 % restante se paga una vez autorizada y confirmada la estancia.
Reserva: Para formalizarse se ha de pagar un 40 % del precio y una reserva de 225 euros; el 60 % restante se paga una vez autorizada y confirmada la estancia.
Albergue Municipal de Biel
Situación: A 404 km. de Madrid, en la comarca de las Cinco Villas, al pie de la sierra de Santo Domingo.
Provincia: Zaragoza.
Contacto: Álvaro, que gestiona también la casa rural Las Lezas (móvil: 639.774.117).
Capacidad: 26 plazas en literas.
Otros servicios: Baños compartidos. Calefacción. Cocina, comedor, sala de estar y TV.
Tarifas: 12 euros por persona y noche; 10 euros si el grupo es de más de 10 persona; 8 euros si el grupo es de más de 15 personas. En caso de querer usar la cocina se paga una fianza de 50 euros.
Albergue El Pajar (Castilsabás)
Situación: A 401 km. de Madrid y 14 km. de la ciudad de Huesca, en la vertiente sur de la sierra de Guara.
Provincia: Huesca.Contacto: Ismael (móvil: 685.138.698).
Capacidad: 16 plazas.
Otros servicios: Salón, comedor y cocina en una amplia estancia con nevera y dos estufas de leña.
Tarifas: 15 euros por persona y día.
Web