Se había anunciado con insistencia que la borrasca Filomena iba a traernos a Madrid una gran nevada, que podía alcanzar los 20 e incluso los 40 centímetros. La noticia fue acogida con cierto escepticismo. Muchos de nosotros no habíamos vivido nada igual en la ciudad. Ya el jueves 7 de enero nevó a partir del mediodía moderamente en Madrid, llegando a cuajar un poco en las calles.
Al amanecer del viernes 8, un cielo plomizo cubre Madrid. Se mantiene la nieve caída la víspera. A eso de las 11 de la mañana empieza nuevamente a nevar. A mediodía parece que la cosa va en serio y la calzada se empieza a cubrir. El Paseo de Coches del Retiro está ya cubierto totamente. Por la tarde sigue nevando y la movilidad por la ciudad empieza a complicarse. Algunas empresas previsoras mendan a sus empleados a casa antes de la hora. Habrá otros trabajadores que no tendrán esta suerte y se quedarán tirados en sus coches al volver a casa. La M-30, la M-40 y tantas otras carreteras se transformaron en ratoneras.
Palacio de los Deportes
Plaza de Dalí
Calle Lombía
Antiguas Escuelas Aguirre (hoy Casa Árabe)
Parque del Retiro
Paseo de Coches o de Fernán Núñez
Estatua del General Martínez Campos
Aluche
Distrito de Tetuán
Lugar no geolocalizado
Basílica de Atocha
Museo del Prado
La terraza de un vecino de Usera
Alcalá de Henares
El Berrueco
Calle Ibiza
Al levantarnos el sábado 9, la nevada continúa y empieza a alcanzar proporciones bíblicas. Ha debido estar nevando ininterrumpidamente toda la noche. Se respira un silencio inusual en la ciudad. Los coches han dejado de pasar y los peatones, algunos con esquíes, pasamos a invadir las calzadas. Se han cumplido los pronósticos que anunciaban una gran nevada. Y seguirá nevando toda la mañana, en algunos momentos con fuerza. Y continuará nevando hasta media tarde. 30 horas seguidas. En los medios dirán que en Madrid cayeron unos 50 litros, todos de nieve.
Un vecino de Usera nos da los buenos días
Amanece en Pedrezuela
Aluche
Viaducto de Segovia
Calle Carranza
Calle Ibiza
Calle Narváez
Calle Ibiza
Una senderista bien camuflada
Río Manzanares
Calle Bravo Murillo
Casa de Campo
Lago de la Casa de Campo
Aluche
Calle Atocha
Plaza de Santa Ana
Collado Villalba
El Berrueco
El domingo 10, Filomena ya habia pasado y la gente se lanzó a las calles a disfrutar de la nieve, desoyendo las recomendaciones dadas por el alcalde de Madrid. Nuestro carácter mediterráneo nos pierde.
Calle Ibiza
El vecino de Usera saca la pala
Aluche
Valle del río Guadalix
Embalse de Pedrezuela
El Berrueco
Embalse del Atazar
Manzanares El Real
Embalse de Santillana
Alrededores de Lozoya
Embalse de Pinilla
Cerro de la Cruz
El lunes 11, muchas calles de Madrid siguen impracticables a causa de la nieve, una nieve que con las heladas nocturnas se ha ido transformando en hielo. Muchos madrileños se quedarán en casa teletrabajando y las escuelas permanecerán cerradas. Así será durante toda la semana. La ciudad va a tardar unos cuantos días en retomar el pulso. Los máximos responsables políticos vuelven a dar otra imagen de incompetencia. Especialistas en echarle la culpa al otro, se muestran incapaces de gestionar la crisis con solvencia. No es populismo. Lamentablemente es lo que hay.
Madrid desde el aire
Parque de las Cruces
Avenida de Asturias
Barrio del Pilar
El Retiro desde la Puerta de Hernani
Puerta de la Reina Mercedes (Parque del Retiro)
Atardecer en el Retiro